Al menos en España ya son pocas las voces públicas que arremeten contra la acogida de refugiados y refugiadas de esta crisis. Puede ser que aquellas se esperaría críticas estén convencidas con los muchos argumentos sobre el daño que estamos haciendo no sólo a las personas sino también a la propia UE. Pero puede también que no les merezca la pena ponerse en contra de lo que parece ser un sentimiento mayoritario (aunque no aparezca como principal preocupación en el CIS o precisamente por ello) sabiendo que, en realidad, la UE no hará grandes cosas porque es improbable poner de acuerdo a los estados; para qué entonces arriesgarse a ser impopular.
Sí pero todavía nos quedan resquicios como se puede ver en esta noticia del ABC que titula “España extrema la seguridad ante la acogida de 200 asilados”. Por supuesto el temor que se quiere sembrar, la relación ya establecida hace unos meses con la que se juega, es el miedo a que entre estas personas se cuelen yihadistas.
En principio no hay nada que objetar a la seguridad que se anuncia, si bien leyendo la noticia o por ejemplo otra publicada en EFE, parece que esta está todavía poco articulada y clara. No obstante cabe siempre preguntar si realmente los yihadistas no tienen otra forma menos costosa y segura para ellos de entrar en Europa. Yo tiendo a pensar que sí, muchas otras, eligen esta dolorosa, calamitosa y peligrosa los que no tienen otra opción, seguro. Con dinero hay opciones mejores de entrar en la UE y pasar desapercibido. No se olviden, además, que en el caso de España, los más normal es que las personas acogidas estén unos 18 meses en centros o en contacto frecuente con personal especializado, y cuanto menos localizadas.
Tampoco conviene olvidar que el tema de la identidad en el caso de los refugiados no pocas veces es algo delicado, si huyen es por algún motivo y se debe tener cuidado para que si alguien quiere encontrarles no pueda hacerlo, es esta también una responsabilidad de los estados, no sólo la de velar por que no se cuelen los malos; proteger a los que refugias.
Verán, todo lo que se dice en la noticia no deja de ser lo que ya está establecido en el procedimiento de asilo que, cabe recordar, no es nuevo para esta crisis. La policía y el ministerio intervienen desde siempre. La noticia menciona, por ejemplo, el tema de los pasaportes falsos, cosa que es tan vieja como el procedimiento; lleva ocurriendo mucho tiempo, no es algo que se desconozca ni tampoco que sea mayoritario entre las personas que solicitan asilo, pero ocurre. Y si lo hace, en contadas ocasiones es para ocultar intenciones o pasados delictivos y más para mejorar las opciones de conseguir asilo que han tendido siempre a ser bastantes escasas, no lo olvidemos.
Hay también una cuestión que me pregunto. En principio estas personas son reasentadas, es decir, ya tienen el asilo concedido en otro país y se mueven para España porque esta quiere y asume ese estatuto ¿o no? No termino de verlo claro entre las noticias. Desde luego hay una diferencia entre ambas figuras siendo parte del mismo sistema. Para lo que nos concierne, ya otro país ha realizado la evaluación tanto personal como de seguridad antes de conceder el estatuto. Y si bien existen más o menos medios según los países, todo está bastante regulado partiendo de los principios generales de la Convención de Ginebra que los países deben aplicar. Tampoco es que España haya acogido muchos reasentados, pero es algo que ya venimos haciendo desde hace unos pocos años.
En mi modesta opinión hay suficientes matices en todo lo relacionado con el asilo como para centrarse sólo en el temor a que se cuelen yihadistas y me gustaría ver que las noticias los van presentando de manera mesurada y realista.